lunes, 5 de noviembre de 2012





  
Entonces despierto

      En mis sueños puedo volar, surcar los cielos y entretenerme con las nubes dejando que sus 

diminutas gotas me refresquen. Posarme sobre la rama más alta o acercarme al suelo para 

contemplar el mundo desde abajo. El aire acaricia mi cara y me cautiva con esa sensación de

libertad que da el estar suspendido en la nada. Oigo voces que se acercan, me esfuerzo 

intentando comprender que dicen, pero sin resultado. En estos días todo fue confuso, apenas 

recuerdo cómo llegué aquí. Intenté mover el ala y..lo conseguí. Era la señal, emprendí el vuelo 

hacia la gran ventana que había permanecido abierta todo el tiempo.

martes, 16 de octubre de 2012

 
    Decisión



  Finjamos que no nos conocemos, me dijo. Peticiones de ese tipo salían de su boca como de la 

mía bostezos cuando nos veíamos. Si a lo largo de los años continué frecuentando su compañía 

fue por una mezcla de afecto, rescoldos de lazos más fuertes en el pasado, y culpa, 

amorosamente cultivada por mi amigo. Pero ese afán suyo de ser el centro de todas las 

tormentas acababa con mi buena disposición. Alguna vez, en el último momento,estuve a punto 

de no presentarme a la cita convenida, finalmente siempre acudía, maldiciéndome por ser 

incapaz de librarme de esta absurda costumbre. Hoy no podría decir qué fue lo que pasó,      

pero en cuanto pronunció la frase, no hizo falta más; me dí la vuelta y sin mediar palabra alguna, 

emprendí el camino contrario sin volver la vista. Le concedí su último capricho.

martes, 18 de septiembre de 2012



Cuentos

     
        Cortas, alegres, improvisadas. Otras largas, contadas con voz pausada y mirada en el

 infinito. Desde aquella primera historia ya nada fue igual. Todo se movía, volaba, bailaba...

en mi mirada infantil se podía percibir cuándo los tomates aplaudían el impecable baile de las 

zanahorias. Su voz parecía una chistera de mago. Mi abuelo era un gran contador de vidas.