jueves, 15 de febrero de 2018
Apéndices
Hay bolsillos tacaños y bolsillos burlones.
Los hay que parecen menguantes y otros gigantones.
Existen muchos tipos de bolsillos. Hay documentado algún caso, de
encontrar a un bolsilliario queriendo hacer intercambio, resulta
raro comprobar que haya seres que no sepan, que los bolsillos no
se cambian, ni se venden... solo a veces se transforman.
Esos pequeños sacos que forman parte de nuestra vida, hablan por
sí solos, nos descubren desde dentro, dicen cómo somos.
Cuando salimos al mundo sin ninguno con nosotros, incorporamos
en su defecto, bolso o bandolera, mochila o una bolsa cualquiera.
Hay quienes lo llaman alma, otrxs le dicen corazón, yo digo que
son bolsillos, donde llevamos lo que somos, lo bueno y lo peor.
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